He encontrado un artículo muy interesante que me gustaría compartir con vosotros. Es una especie de historia que sucede en el colegio, y la verdad es que da que pensar.
El artículo está escrito por Roberto Blanco Hurtado. Aquí lo tenéis:
Hace poco, mi sobrino de nueve años, me explicó algo que sucedió en su colegio entre dos de sus compañeros de clase. Al parecer, a uno de ellos, sin que se diera cuenta, se le cayó un billete de 10 euros, que quedó en el suelo del patio hasta que el otro chaval lo encontró. Este último no pudo reprimir su alegría, a pesar de la insignificancia de la cantidad hallada y, con una sonora exclamación, dio a conocer la noticia del hallazgo a quien estaba en las proximidades del lugar, que no eran otros que mi sobrino y el muchacho que había perdido ese dinero.
El afectado, intentando buscar en sus bolsillos el billete sin demasiado éxito (puesto que lo había perdido), en seguida dijo que era suyo, cosa que el agraciado negó. Casi como un acto reflejo, el niño afectado preguntó: "¿Me juras que el billete es tuyo?". El otro niño no sé si era consciente del alcance y de las consecuencias de lo que hacía, pero no tuvo reparos en jurar en falso y decir que el billete era suyo, cuando en realidad no lo era.
¿Cómo estamos educando a las generaciones futuras? ¿Qué valores les estamos transmitiendo? ¿Cómo puede ser que a tan tempranas edades queden cegados por cantidades ridículas de dinero con las que, en la actualidad, poca cosa se puede hacer? ¿De quién aprenden eso de "¿me lo juras?".
Son cuestiones que deberíamos plantearnos, porque creo que algo hemos de corregir los mayores.
¡Esperamos vuestras opiniones!
Yo recuerdo que mis amigos decían que de buena, era tonta, porque siempre intentaba devolver a cada uno lo que era suyo, o hacía favores a quienes menos lo merecían, y se reían de mí cuando yo decía que algo había que hacer en este mundo para cambiarlo, para que hubiera más honestidad. Y puede ser que en fondo haya elegido esta profesión por eso, porque el problema hay que cortarlo desde la raíz. Es muy importante que en el aula además de conocimientos se enseñen valores, para poder hacer de este un mundo mejor. Sé que soy una sola persona, pero si todos nos sumamos; mi granito de arena, y el vuestro, puede que consigamos cambiar este mundo de corruptos, intereses y mentirosos.
ResponderEliminarHola chic@s.
ResponderEliminarMe parece interesante a la vez que sorprendente el artículo que acabáis de publicar. La verdad que hoy en día se escuchan comentarios y frases de niños de tan solo 6 años que ni yo misma a día de hoy podría decir. Esto te hace reflexionar sobre qué valores les estamos transmitiendo a los niños y porque se está produciendo esta situación. Considero que el problema está en los adultos y personas que les rodean por lo que debemos plantearnos cambiar esta situación.
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Hola chicas.
EliminarEstá claro que la sociedad ha producido un gran cambio en la forma de ver las cosas, y esto afecta directamente en las nuevas generaciones, provocando lo que, como ya habéis dicho, tenga un vocabulario indebido y tienda todo al individualismo y no a la cooperación entre todos.
Gracias por visitarnos y perdón por el retraso.